Su pizza acompañada del mejor diseño
¿Ir a local o pedir a domicilio? Esta pregunta siempre tiene una respuesta muy clara. Si pueden venir a casa, para qué me voy a mover. Sin embargo, es posible que quedandote en el sofá de tu casa te pierdas lo mejor de la pizza. Su entorno.
Estamos acostubrados a que las grandes cadenas de ese manjar circular se preocupen poco por sus locales. Son simples, sin pretensiones, llenos de plástico barato. No acompañan a quedarse ahí. Pero hay esperanza.
Algunas pizzerías creen que el diseño puede ser uno de sus «toppings» más atractivos.
Orno Pizzería en Olivos, Argentina, un proyecto de Guadalupe García Mosqueda y su grupo Mezcla. Formando equipo con su hermano Juan Agustín García Mosqueda, fundador de la galería de diseño Chamber NYC, diseñó el espacio alrededor del horno, haciendo de la preparación de la pizza el espectáculo principal. Por dentro y por fuera, todo el lugar aparece con tonos de verde azulado y azul.
Es difícil no estar totalmente encantado con el horno de pizza gigante de bola de discoteca en esta pizzería austriaca llamada Disco Volante. Ubicada en Viena y diseñada por el arquitecto Lukas Galehr, Disco Volante atenúa las luces por las tardes y hace brillar varios focos en el horno para crear una inundación de color en todo el espacio. El nombre de la pizzería se traduce en «disco volador», y está destinado a recordar el barco de escape del villano Emilio Largo y el famoso automóvil diseñado a principios de los años 50 con el mismo nombre. Las baldosas minimalistas en blanco y negro, las paredes blancas y limpias y las sencillas sillas de madera ofrecen un contraste perfecto con todo el brillo y el glamour.
Parte de una cadena de pizzerías en los Países Bajos, este VIA particular, en Zwolle, ocupa uno de los edificios más antiguos de la ciudad. Studio Modijefsky diseñó un fabuloso interior para el restaurante, con la iluminación como la estrella. Una estructura de acero de color salpicada de bombillas flotan en lo alto, suspendidas por medio de un cable conectado a tiras de acero en las paredes que cuentan con sus propias luminarias verticales. En otros lugares, más bombillas cuelgan directamente del alambre, formando diferentes formas geométricas. En el nivel del suelo, los guiños con detalles de diseño clásico italiano, como las sillas rosas y la fachada amarilla, aseguran que todo el lugar sea un espectáculo.
En definitiva, estos ejemplos nos demuestran que no importa el tipo de negocio que tengamos, siempre podemos transformarlo a través del diseño y conseguir que sume un valor extra a nuestra marca.